Cashflow is the lifeblood of your business.
What is cashflow?
It's the money coming in and going out of your business.
Why is it important?
Well, if you don't keep track of it,
you can find yourself short of cash to pay expenses,
even if your business appears to be making a profit.
So how do you manage your cash flow?
First, learn your cash flow cycle.
It involves invoicing customers,
keeping track of inventory sold and on hand,
and watching your expenses.
Send invoices as soon as the job is done
or a purchase is made,
and have a schedule for when your payments are due.
If something is not selling, adjust your inventory.
Any merchandise just sitting in your store is tying up cash
that should be coming back in as revenue.
So if something isn't selling well, mark it down,
get rid of it, and put that money back to work.
Second, plan ahead.
Think ahead to what supplies, equipment,
or inventory you'll need to buy and plan your spending.
Buying things as you need them
is an easy way to get into trouble.
Consider setting up a business line of credit
before you need it.
When business is good, you'll have a better chance
of being approved at lower interest rates.
Have an emergency stash of cash.
Some experts recommend having enough on hand
to cover six months of business expenses.
Finally, take advantage of technology.
Use accounting software or apps to track your incoming
and outgoing expenses to keep you out of the red.
To keep your business up and running,
showing a profit is not enough.
You need to have cash on hand for expenses,
and managing your cash flow will help you do just that.
El flujo de efectivo
es la sangre vital de tu negocio.
¿Qué es el flujo de efectivo?
Es el dinero que entra y sale de tu negocio.
¿Por qué es importante?
Bueno, si no lo controlas,
puedes encontrarte sin efectivo para pagar gastos,
incluso si tu negocio parece estar obteniendo ganancias.
Entonces, ¿cómo gestionas tu flujo de efectivo?
Primero, conoce tu ciclo de flujo de efectivo.
Involucra facturar a los clientes,
llevar un registro del inventario vendido y en existencia,
y controlar tus gastos.
Envía facturas tan pronto como se complete el trabajo
o se realice una compra,
y establece un calendario para los pagos.
Si algo no se vende, ajusta tu inventario.
Cualquier mercancía que se quede en tu tienda
está reteniendo dinero que debería regresar como ingreso.
Entonces, si algo no se vende bien, bájale el precio,
deshazte de ello y pon ese dinero a trabajar de nuevo.
Segundo, planifica con anticipación.
Piensa con antelación qué suministros, equipos
o inventario necesitarás comprar y planifica tus gastos.
Comprar cosas a medida que las necesitas
es una manera fácil de meterte en problemas.
Considera establecer una línea de crédito comercial
antes de necesitarla.
Cuando los negocios van bien, tendrás una mejor oportunidad
de ser aprobado a tasas de interés más bajas.
Ten un fondo de emergencia de efectivo.
Algunos expertos recomiendan tener lo suficiente en efectivo
para cubrir seis meses de gastos comerciales.
Finalmente, aprovecha la tecnología.
Utiliza software de contabilidad
o aplicaciones para controlar tus ingresos
y gastos para evitar caer en números rojos.
Para mantener tu negocio en funcionamiento,
mostrar ganancias no es suficiente.
Necesitas tener efectivo disponible para gastos,
y gestionar tu flujo de efectivo te ayudará a lograrlo.