Business owners face many expenses
they need to plan for, but if you own your business property
a significant cost will be an annual property tax.
Property tax amounts depend on a variety of things.
First and foremost is the assessed value
of your land and business building.
This value is determined by a local taxing authority
such as a county assessor, and it can vary annually.
The assessed value of the property is then used
to calculate taxes based on the budget needs
of a variety of taxing districts
such as cities, counties, and school districts.
When you get your property tax bill, you should look at it
closely and compare it to previous assessments.
You have the right to appeal an assessment,
and you might want to consider doing just that.
Especially if there's been a substantial increase
in the value of your property.
Before challenging your property tax,
you'll need to familiarize yourself with the appeal process,
paying close attention to any deadlines
and process requirements.
You'll also need to gather and organize your evidence
which could include comparable business values
in your area and evidence of any mistakes made
by the assessor in property size or improvements.
Rather than doing all this work yourself,
you might consider consulting an expert such as a lawyer
or tax advisor who can help you through the process.
If all of this sounds difficult, well it can be,
but it can potentially save your business
a substantial amount of money
if you could prove your tax bill was figured to be too high.
Los dueños de negocios
enfrentan muchos gastos que deben de planear,
pero si eres dueño de la propiedad de tu negocio,
un costo significativo será un impuesto anual de propiedad.
La cantidad de impuesto de propiedad
depende de varias cosas.
Antes que nada está el valor tasado de tu terreno
y el edificio del negocio.
Este valor es determinado por una autoridad fiscal local,
como un tasador del condado, y puede variar anualmente.
El valor tasado de una propiedad se usa luego
para calcular impuestos basándose en las necesidades
de presupuesto de una variedad de distritos fiscales,
como ciudades, condados, y distritos escolares.
Cuando recibas tu factura de impuesto de propiedad,
vela de cerca y compárala con evaluaciones previas.
Tienes derecho a apelar una evaluación
y puede ser que consideres hacer justo eso.
Especialmente si hay un incremento sustancial
en el valor de la propiedad.
Antes de desafiar tu impuesto de propiedad,
necesitarás familiarizarte con el proceso de apelación,
prestando atención a cualquier fecha límite
y requisitos del proceso.
También tendrán que reunir y organizar su evidencia,
que podría incluir el valor de negocios comparables
en su área y evidencia de cualquier error cometido
por el tasador en el tamaño de propiedad o mejoras.
En lugar de hacer todo este trabajo por tu cuenta,
puede ser que consideres consultar a un experto,
como un abogado o un consejero fiscal,
quien pueda ayudarte a través del proceso.
Si todo esto suena difícil, bueno, puede serlo,
pero puede ahorrarle potencialmente
una cantidad sustancial de dinero a tu negocio
si puedes probar que tu factura de impuestos
fue tasada muy alta.