Buying a home is one of the biggest financial moves you'll ever make. And if you're like most people you're probably planning on using a mortgage to pay for it. But like a roommate, a mortgage is something you'll have to live with every day so choose wisely. The best and safest choice is what the Consumer Protection Act calls a qualified mortgage. To be considered a qualified mortgage, a loan must offer you certain protections. It must be for 30 years or less. It can't offer interest-only payment periods in which your payments only go toward the interest, and not the principal. It can't use negative amortization, in which your loan principal is actually increasing even though you make you're making payments. It also avoids balloon payments in which large lump sums are due at scheduled points during the loan period, though exceptions are made for smaller creditors. As your lender, we want you to be able to repay your mortgage which is why we take a variety of factors into consideration when offering you a qualified mortgage. The first is your monthly income which includes your employment status, and any assets you own. The second is any debt you may owe including the cost of the mortgage. These two numbers give us your debt to income ratio or DTI. A good target is 43% or less. Your credit history also plays a role in determining what kind of interest rate you qualify for. With these numbers in hand we'll figure out your ability to repay and hopefully get you into that dream home as soon as possible. Since your mortgage will be going with you to your new home we want it to be something you can live with. Come into your nearest branch and talk to a loan officer today.

Comprar una casa es una de las decisiones financieras más importantes que tomarás. Si eres como la mayoría de las personas, probablemente estés planeando usar una hipoteca para pagar. Pero al igual que un compañero de cuarto, una hipoteca es algo con lo que tendrás que vivir todos los días así que escoge con cuidado. La mejor elección y la más segura es la que la Ley de Protección al Consumidor llama hipoteca calificada. Para considerarse una hipoteca calificada, un préstamo debe ofrecerte ciertas garantías. Debe ser por 30 años o menos. No puede ofrecer periodos de pago únicamente de intereses en lo cuales tus pagos sólo van hacia el interés y no el capital. No puede usar amortización negativa en la que tu capital de préstamos de hecho aumenta a pesar de que estés efectuando los pagos. También evita pagos globales en los que un pago único grande se debe pagar durante puntos programados durante el periodo de préstamo aunque se hacen excepciones para pequeños prestamistas. Como tus acreedores queremos que puedas saldar tu hipoteca por lo que consideramos una variedad de factores cuando se te ofrece una hipoteca calificada. El primero es tu ingreso mensual el cual incluye tu situación laboral y los bienes que posees. El segundo es cualquier deuda que esté pendiente, incluyendo el costo de la hipoteca. Estos dos números nos proporcionan tu relación entre deudas e ingresos o DTI. Un buen objetivo es 43% o menor. Tu historial crediticio también desempeña un papel en determinar para qué tipo de tasa de interés calificas. Con estos números a la mano sabremos tus posibilidades de saldar y quizá obtener ese hogar de ensueño tan pronto como sea posible. Ya que tu hipoteca irá contigo a tu nuevo hogar, queremos que sea algo con lo que puedes vivir. Acude a nuestra sucursal más cercana y platica con un agente de préstamos hoy.