You've probably heard about the importance of an emergency savings fund, but sometimes it can be difficult to know where to start. The first question you're probably asking is: How much should you save? Experts recommend a minimum of $500, which is enough to cover minor auto repairs or unexpected costs. If you're carrying a lot of debt, $500 is a good starting place. Once you've reached that goal, turn to paying down your debt as quickly as possible. When that's gone, you can focus on saving more. Saving three to six months worth of expenses would help protect you against major life events, like a job loss or medical need. With a goal in mind, it's time to start saving. The easiest way to do this is to make it automatic. You can schedule automatic transfers that move money from your checking account to your savings. Or if your employer uses direct deposit, it may be possible to split your paycheck into two accounts. If you have your regular income or living paycheck to paycheck, you might feel like this isn't an option. Consider using an app that rounds up any purchases you make to the nearest dollar and deposits the difference, even a little bit can add up over time. You can also take advantage of one-time payments to stash something away. If you're expecting a tax return, commit to depositing at least a part of it into your emergency fund. Once your savings habit is set, you'll want to reevaluate on a regular basis to see if your technique is working, or if you need to adjust to meet your goal. While saving money can sometimes be difficult, even a small amount could be enough to cover an unexpected expense and help keep you debt-free.

Probablemente has oído hablar de la importancia de un fondo de ahorro de emergencia, pero a veces puede ser difícil saber por dónde empezar. La primera pregunta que probablemente te haces es: ¿Cuánto deberías ahorrar? Los expertos recomiendan un mínimo de $500, que es suficiente para cubrir reparaciones menores del auto o costos inesperados. Si tienes muchas deudas, $500 es un buen punto de partida. Una vez que hayas alcanzado esa meta, enfócate en pagar tus deudas lo más rápido posible. Cuando eso se haya ido, puedes concentrarte en ahorrar más. Ahorrar de tres a seis meses de gastos te ayudará a protegerte contra eventos importantes de la vida, como la pérdida de un empleo o una necesidad médica. Con una meta en mente, es hora de empezar a ahorrar. La forma más fácil de hacerlo es hacerlo automático. Puedes programar transferencias automáticas que muevan dinero de tu cuenta corriente a tu cuenta de ahorros. O si tu empleador usa depósito directo, puede ser posible dividir tu cheque de pago en dos cuentas. Si tienes ingresos regulares o vives de cheque en cheque, podrías sentir que esto no es una opción. Considera usar una aplicación que redondee cualquier compra que hagas al dólar más cercano y deposite la diferencia, incluso un poco puede sumar con el tiempo. También puedes aprovechar los pagos únicos para guardar algo. Si esperas un reembolso de impuestos, comprométete a depositar al menos una parte en tu fondo de emergencia. Una vez que tu hábito de ahorro esté establecido, querrás reevaluarlo regularmente para ver si tu técnica está funcionando, o si necesitas ajustarla para alcanzar tu objetivo. Aunque ahorrar dinero a veces puede ser difícil, incluso una pequeña cantidad podría ser suficiente para cubrir un gasto inesperado y ayudarte a mantenerte libre de deudas.