Weddings can be beautiful, fun, and costly.
So whether you're planning on spending a few hundred dollars
for a simple ceremony, or tens of thousands
for something elaborate, it's important to plan ahead.
Set a spending goal, then cut back if expenses
get out of control.
After popping the big question,
the next step will involve what kind of wedding
you want to have, and who's going to be paying for it.
While tradition has the bride and grooms parents
paying portions, it could boil down to just what the couple
can afford on their own.
Either way, it's likely that people will need to start
saving money and tracking costs.
Experts recommend that you think about what's most important
to each of you, and then start allotting
your available funds as necessary.
As you plan your costs, here are some items
to put on your checklist,
reception including number of guests,
food and beverage costs, and venue,
photography or videography,
clothes, including the wedding dress.
Flowers, entertainment, rings, ceremony,
invitations and announcements.
And those costs don't include the bachelor,
and bachelorette parties, the rehearsal dinner,
or the cost of the honeymoon.
You'll find that you can save a chunk of money
by reducing your guest list if necessary,
controlling your photo expenses,
or even what day of the week, or what time of year
you schedule the wedding.
And unless you're willing to spend the time,
and are good at organizing,
you might consider working with a wedding planner
who can help you find everything from your venue,
to your photographer and caterer.
Also, don't hesitate to ask friends and family
for recommendations and advice.
Planning will be the key.
So start saving, and controlling costs as soon as possible,
so you don't get overwhelmed.
(light music)
Las bodas pueden ser hermosas, divertidas
y costosas.
Así que, ya sea que estén planeando gastar unos pocos
cientos de dólares
para una ceremonia sencilla, o decenas de miles
para algo más elaborado,
es importante planificar con anticipación.
Establezcan una meta de gasto, luego redúzcanla si los
gastos se salen de control.
Después de hacer la gran pregunta,
el próximo paso implicará qué tipo de boda
quieren tener y quién va a pagar por ello.
Si bien la tradición tiene a los padres de los novios
pagando porciones, podría reducirse a lo que la pareja
pueda pagar por su cuenta.
De cualquier manera, es probable que la gente necesite
comenzar a ahorrar dinero y darle seguimiento a los costos.
Los expertos recomiendan que piensen en lo más importante
para cada uno y después asignar
sus fondos disponibles según sea necesario.
A medida que planifican sus costos,
aquí hay algunos artículos
para poner en su lista de pendientes.
Recepción, incluyendo el número de invitados,
gastos de alimentos y bebidas, y del lugar,
fotografía o videografía.
Ropa, incluyendo el vestido de novia.
Flores, entretenimiento, anillos, ceremonia,
invitaciones y anuncios.
Y esos costos no incluyen las despedidas de soltero
y de soltera, la cena de ensayo,
o el costo de la luna de miel.
Descubrirán que pueden ahorrar una buena cantidad de dinero
reduciendo su lista de invitados si es necesario,
controlando los gastos de fotografía,
o incluso dependiendo del día de la semana o época del año
quieren tener su boda.
Y a menos que estén dispuestos a pasar el tiempo,
y que sean buenos organizadores,
podrían considerar trabajar con un planificador de bodas
quien puede ayudarles a encontrar todo desde su lugar,
su fotógrafo y el servicio de catering.
Además, no duden en preguntar a amigos y familiares
recomendaciones y consejos.
La planificación será la clave.
Así que empiecen a ahorrar,
y a controlar gastos cuanto antes,
para que no se agobien.